sábado, 26 de enero de 2013

Las Revueltas Irmandiñas

Las revueltas irmandiñas, también llamadas revueltas Hermandinas o Guerras Irmandiñas son una serie de revueltas que tuvieron lugar durante el sigo XV en Galicia contra los señores feudales.
En 1230 se unen Castilla y León, Galicia se convirtió en una posesión dependiente de la Corona de Castilla y tenía gran peso destro de esta. El gran poder del clero y la nobleza en ella supusieron una gran molestia para la Corona. Esta nobleza abusaba del pueblo mediante que el patrocinio del bandolerismo señorial o el aumento de los inpuestos y aranceles entre señoríos. El campesinado fué la parte de la población que más sufrió los abusos señoriales asi que realizó varias revueltas. Las más importantes fueron la Irmandade Fusquenlla, en contra sobre todo de los señores episcopales, y la Grande Guerra Irmandiña.

La Irmandade Fusquenlla fué el comienzo de todo, se formó en el año 1431, en las tierras del señor de Andrade, por la extrema dureza con la que Nuno Freire de Andrade, o Malo, trataba a sus vasallos. La revuelta se inició en las comarcas de Pontedeume y Betanzos y se expandió por los obispados de Lugo y Mondoñedo e incluso el arzobispado de Santiago de Compostela. Roi Xordo, un hidalgo de baja estirpe de La Coruña cuyo nombre lleva la calle contigua al instituto Concepción Arenal de Ferrol, dirigió las tropas de la Irmandade Fusquenlla. Murió en la represión posterior a la derrota irmandiña (1435).

La Grande Guerra Irmandiña tuvo lugar entre 1467 y 1469. Los preparativos para la formación de una Irmandade Xeral empezaron en los años anteriores por parte de Alonso de Lanzós y con el apoyo de varios ayuntamientos (La Coruña, Betanzos, Ferrol, Lugo), que actuaron como iniciadores del movimiento. La revuelta irmandiña fue una auténtica guerra civil por la participación social que tuvo.
Años consecutivos de malas cosechas y pestes provocaron una revuelta popular. Los irmandiños contaban con unos 80.000 hombres. En la guerra irmandiña participaron varios grupos sociales: campesinos, gentes de ciudades, baja nobleza, hidalguía y miembros del clero. Los jefes del movimiento pertenecían a la baja nobleza. Los líderes fueron: Pedro de Osorio en el centro, sobre todo en la zona compostelana, Alonso Lanzós en la zona norte de Galicia y Diego de Lemos en el sur de Lugo y norte de Orense.
Los enemigos de los irmandiños fueron fundamentalmente nobles laicos y dueños de castillos y fortalezas. Los irmandiños destruyeron alrededor de 130 castillos y fortalezas durante los dos años de la guerra. Los linajes Lemos, Andrade y Moscoso fueron el blanco preferido de los irmandiños que, por el contrario, no atacaron a los eclesiásticos. En un primer momento, parte de la nobleza que sufrió la ira de los irmandiños huyó a Portugal o Castilla. En 1469, Pedro Madruga inició desde Portugal el ataque feudal, con el apoyo de otros nobles y del arzobispo de Santiago de Compostela. Las tropas feudales vencieron a los irmandiños, arrestando y matando a sus líderes. La victoria de las tropas de Pedro Madruga se debió en parte al apoyo de los reyes de Castilla y Portugal, además de la división de las fuerzas irmandiñas. Sin embargo los irmandiños consiguieron dominar Galicia durante dos años. Como castigo fueron obligados a reconstruír, uno por uno, todos los castillos que habían destruído.

Además entre 2006 y 2008 cada año se realizaba en el Castillo de Monterrei una fiesta de tres días de duración llamada: "Irmandiños: a revolta". Creada por 13Negativo.com y financiado por la Xunta de Galicia, contó con unos 800 participantes en su última edición, siendo el juego de rol en vivo con más participantes del mundo. Aquí un trailer.

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